Los encuentros de “unidad” del peronismo ya parecen un rompecabezas. Ayer, a la cita convocada por el senador Miguel Angel Pichetto en Gualeguaychú finalmente no fue ningún gobernador aunque sí algunos diputados del interbloque Argentina Federal que responden a ellos, junto a representantes del massismo y algún que otro randazzista. Además de la foto de rigor, suscribieron un documento salido indudablemente de la pluma de Pichetto dado que habla de la construcción de una “nueva oposición” de cara a 2019 que será de “centro nacional” y promotora de un “capitalismo moderno”. También tiene su sello la advertencia dirigida al kirchnerismo: “no nos convence el planteo de unidad como un simple amontonamiento de dirigentes sin un proyecto común. No vamos a justificar el pasado”. Por si hacía falta, Pichetto aclaró que no había ninguna posibilidad de que hicieran una alianza con Cristina Kirchner ni tampoco “con fuerzas de izquierda”.
En cada cita pasa más o menos lo mismo. Cuando se anuncia se anticipa que van a ir algunos que después por equis razones se van bajando hasta que el encuentro termina reconfigurado. Lo que está claro a esta altura es que los gobernadores peronistas consideran que todavía es temprano para iniciar cualquier actividad proselitista y se cuidan mucho de aparecer en estas reuniones salvo quienes tienen aspiraciones presidenciales como Alberto Rodríguez Saá o Juan Manuel Urtubey. Pero esta vez ni siquiera participó el anfitrión, el entrerriano Gustavo Bordet.
Ante este panorama, Pichetto salió a aclarar un par de días antes que no era la intención del encuentro que participaran los gobernadores y acordó a cambio el apoyo de Sergio Massa que no fue, pero mandó a varios de sus diputados encabezados por la jefa de bloque, Graciela Camaño. En definitiva, se trató de un encuentro de algunos senadores y diputados del interbloque Argentina Federal, del Frente Renovador y de Cumplir. Como previa, los legisladores recorrieron –casquito verde en mano– el Parque Industrial y se reunieron con autoridades de la Corporación del Desarrollo de Gualeguaychú, que nuclea a pymes de la ciudad.
“No queremos una política económica autoritaria porque ya fracasó, pero tampoco un modelo que deje que el mercado defina todas las acciones del Gobierno”, buscó definir el documento del encuentro qué quieren decir con lo de la propuesta “de centro”. La mayor definición buscaron darla por la contraria: en la presentación varias veces aclararon que no tenían nada que ver con el kirchnerismo ni cualquier cosa de izquierda. “No tenemos nada que ver con la ex presidenta ni con La Cámpora, quiero decirlo categóricamente porque hace a la cuestión fundacional”, subrayó Pichetto en la conferencia de prensa.
El encuentro en sí consistió en un almuerzo y una reunión a puertas cerradas en el hotel Aguay y una conferencia de prensa. Sin público, militancia, ni nada. “No es un encuentro en un gimnasio, es un debate de ideas”, buscó contextualizar Pichetto. “Lo importante es que la oposición está dando respuesta al reclamo de unidad que la gente pide”, sostuvo Camaño, aunque curiosamente la propuesta de unidad se lanzó aclarando que no harían una alianza con el kirchnerismo.
Como pasó en otros encuentros de este tipo, se le adjudicaron a los legisladores la “representación” de sus gobernadores. Por ejemplo, el senador cordobés Carlos Caserio actuó como representante del gobernador Juan Schiaretti y el senador salteño Rodolfo Urtubey hizo lo propio respecto a su hermano, el gobernador Juan Manuel. Los otros integrantes del bloque que preside Pichetto que participaron Pedro Guastavino, Alfredo Luenzo, Guillermo Snopek, Sigrid Kunath, Carlos “Camau” Espínola, Beartiz Mirkin, Julio Catalán Magni y José Ojeda. Respecto a los diputados, estuvieron los miembros del bloque Argentina Federal Pablo Kosiner, Diego Bossio, Martín Llaryora, Juan José Bahillo y Mayda Cresto, y varios del Frente Renovador: Camaño, Marco Lavagna, José Ignacio de Mendiguren, Alejandro Grandinetti, Raúl Pérez y Daniel Arroyo. También viajaron dirigentes que en la última elección apoyaron la candidatura de Florencio Randazzo –un espacio hoy en reconfiguración– como el ex senador Juan Manuel Abal Medina, el ex diputado Oscar Romero y Florencia Casamiquela.
El caso de Arroyo es curioso porque el lunes estará en Catamarca para un encuentro que será continuidad del que se hizo en la UMET en febrero, junto a Daniel Filmus, Agustín Rossi, Alberto Fernández, Felipe Solá y Chino Navarro. Ese es un espacio que apunta a la unidad de la oposición en 2019 pero que para nada excluye al kirchnerismo ni tampoco a fuerzas de izquierda, como se planteó ayer en Gualeguaychú.
No hubo ayer representantes del peronismo bonaerense. Se había dicho que el titular del PJ provincial, el intendente de Merlo, Gustavo Menéndez, iría, pero no fue así. El vicepresidente e intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray, envió una carta expresado su apoyo a “todo tipo de instancias de debate interno” aunque aclarando que por ahora la prioridad está puesta en la reorganización del peronismo bonaerense.