El ministro de Economía, Sergio Massa, anunció el jueves un congelamiento de precios de combustibles hasta el 31 de octubre, nueve días después de las elecciones presidenciales. De esta manera, el aumento unificado de YPF, Shell, AXION y Puma fue del 12,5%. La medida busca contener el impacto en los precios de la devaluación del 22% llevada adelante esta semana, luego de las PASO, y acompaña el pacto con empresas de consumo masivo, que incluye un alivio fiscal para quiénes se adhieran.

“En el día de hoy (por el jueves), a partir de un trabajo de productores, refinadores, la secretaría de Energía, Aduana y la secretaría de Comercio, hemos avanzado en un acuerdo que implica que el aumento del 12,5% será el último hasta el 31 de octubre”, resaltó el funcionario y candidato a presidente por Unión por la Patria. “Una parte del aumento lo asumen los consumidores, otra las empresas del sector y otra el Estado, que resigna impuestos para garantizar entre todos un sendero. Resignamos recursos fiscales y las empresas utilidades para cuidar el bolsillo de la gente”, detalló el documento.

Esta noticia vuelve a poner en relieve la notable disparidad en torno al costo de los combustibles dependiendo de la región en la que uno se encuentre.

Pese a que, porcentualmente, el aumento fue del mismo número para todos, de norte a sur y de este a oeste, las variaciones son evidentes.

Según la agencia NA, mientras en Buenos Aires el Diésel Euro está en $352,6, en Misiones el mínimo está por arriba de los $400; $408,6, para ser exactos. Algo similar ocurre con el Súper, que en Santa Cruz tiene un valor por litro de $207,45 mientras que, en Formosa, está a $283,05.