La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha instado a todos los países a revelar la información que posean sobre el origen del covid-19, después de que Washington lo vinculara a una filtración en un laboratorio chino, algo que Pekín rechaza rotundamente y que tacha de "manipulación política".

"Si algún país tiene información sobre los orígenes de la pandemia, es esencial que la comparta con la OMS y la comunidad científica internacional", declaró este viernes en rueda de prensa el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus. "Todas las hipótesis sobre los orígenes del virus siguen sobre la mesa", declaró.

El jefe de la autoridad sanitaria denunció que la "politización" de la investigación sobre la fuente de la enfermedad está dificultando el trabajo científico y, en consecuencia, haciendo que la humanidad siga corriendo más riesgos.

"Quiero dejar muy claro que la OMS no ha abandonado ningún plan para identificar los orígenes de la pandemia del covid-19", dijo Tedros. Asimismo, subrayó que el organismo no busca culpar a nadie, sino "avanzar en su comprensión acerca de cómo comenzó la pandemia para poder prevenir, prepararse y responder a futuras epidemias y pandemias".

Por su parte, la responsable técnica de la OMS sobre covid-19, Maria Van Kerkhove, admitió este jueves en su cuenta de Twitter sentirse "profundamente frustrada" por el hecho de que Estados Unidos no hubiera compartido con el organismo información adicional sobre sus informes de evaluación del origen del virus.

Durante la conferencia del viernes, la funcionaria instó a los países, instituciones y grupos de investigación que pudieran tener algunos datos sobre los orígenes de la pandemia a compartirlos con la comunidad internacional. Van Kerkhove también señaló que era crucial estudiar los coronavirus que circulan en los animales y cómo las personas entran en contacto con esos animales.

"Manipulación política"

El director del Buró Federal de Investigaciones de Estados Unidos (FBI), Christopher Wray, declaró este miércoles que los orígenes de la pandemia "probablemente sean un posible incidente del laboratorio en Wuhan".

En respuesta, la portavoz oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Mao Ning, criticó la "manipulación política del problema" por parte de EE.UU. y aseveró que las conclusiones de la comunidad de inteligencia estadounidense "tienen poca o ninguna credibilidad".

Asimismo, Mao instó a Washington a que "respete la ciencia y los hechos, deje de politizar este tema, detenga su rastreo de orígenes impulsado por la inteligencia y la política y deje de socavar la solidaridad internacional contra la pandemia".