El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha presentado este domingo las medidas acordadas con el Consejo Extraordinario de Ministros en el municipio de Ipiales (departamento de Nariño) para atender la emergencia en el suroeste del país debido a los derrumbes que provocaron la semana pasada el cierre total de la vía Panamericana, que conecta los departamentos del Cauca y de Nariño.
Los deslizamientos de tierra que inhabilitaron el tránsito por la carretera complicaron el transporte a Nariño, que alberga a más de 1,6 millones de personas, generando escasez de combustibles y otros productos.
Garantizar el abastecimiento de gasolina
"Tenemos que mitigar los efectos de la incomunicación. Para ello, el primer gran tema tiene que ver con la gasolina. Se han establecido varias rutas, que ya están en uso, de abastecimiento de gasolina en el departamento. Una vía es marítima, otra que tiene que ver con el cruce por Ecuador", anunció Petro.
El presidente colombiano aseguró que el Gobierno aumentará los envíos de combustible a la región. "Hay un barco ya cumpliendo esa función entre Buenaventura y Tumaco", subrayó, y precisó que esa política "se mantendrá de manera continua hasta que cese la emergencia".
En ese sentido, Petro también abordó el "incremento especulativo de precios" que supuso dificultades para el abastecimiento de gasolina a la región y al que su Gobierno va a poner fin. "Hay unos precios que, consultando el encarecimiento de fletes, las dificultades, nos parecen los normales. Esos precios tendrán como límite 8.916 pesos (1,90 dólares) galón gasolina y 8.396 pesos (1.79 dólares) galón diésel", anunció.
Comprar cosechas de Nariño
El Estado también se comprometió a comprar las cosechas de Nariño, que serán repartidas en zonas que sufren necesidades. "La mayor parte de lo que exporta el departamento de Nariño al resto del país se llevará a los territorios con mayores índices de hambre en toda Colombia", agregó, indicando que adicionalmente se organizará la compra de tierras en lugares cercanos a donde sucedió el desastre.
El objetivo es que "cada familia que antes del desastre tenía media hectárea como propiedad pase a tener cinco hectáreas de tierra fértil y pueda iniciar un proceso de mayor prosperidad familiar y productiva en la región", destacó el mandatario colombiano.
Sector lechero y de transporte
Entre otras medidas, el Gobierno prometió organizar mesas con los sectores afectados por la incomunicación, como la industria lechera de la región, a la que las autoridades pretenden ayudar buscando que se compren más de 400.000 toneladas de leche a los productores locales. El objetivo es usarla en la producción de quesos, yogures y otros productos lácteos, que luego comprará en su totalidad el Gobierno para repartirlos en el resto del país en el marco de la lucha contra el hambre.
En lo que respecta a los camioneros y otros transportistas de Nariño, se les pagarán los fletes de bienes menos perecederos, "de tal manera que salgan gratuitos para los productores agrarios en el departamento", añadió Petro.