La Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i) otorgó un apoyo económico de 1.100 millones de pesos para realizar los estudios clínicos de las fases II y III de la vacuna nacional contra la Covid 19 “ARVAC Cecilia Grierson”.
Según reportaron desde el Ministerio de Ciencia y Tecnología, se estima que los estudios clínicos de fase 2 y 3 serán “realizados durante el primer trimestre del 2023, lo que permitiría que la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) autorice la vacuna durante el año próximo”.
La vacuna nacional “ARVAC Cecilia Grierson”, que lleva el nombre de la primera médica del país, es desarrollada en conjunto por el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), la Universidad Nacional de San Martín (Unsam) y el Laboratorio Pablo Cassará.
En octubre se presentaron los resultados parciales de la fase 1 de la vacuna, los cuales demostraron que la vacuna es segura y muy inmunogénica.
En este sentido, la vacuna es estable en heladera, de producción local y adaptable a cambios en las variantes circulantes en la región, informaron desde la cartera de ciencia.
A su vez, la vacuna podrá ser utilizado refuerzo respondiendo a las nuevas variantes atenuando la severidad de la enfermedad a pesar de la suba de contagios.
Para los nuevos estudios clínicos se desarrolló una nueva versión de la vacuna que incluye el antígeno en su variante Ómicron, lo que permitirá evaluar durante la Fase III una versión bivalente de la vacuna ARVAC.
El desarrollo de la vacuna se basa en la tecnología de proteínas recombinantes, que se utiliza desde hace décadas para fabricar la vacuna contra Hepatitis B que se utiliza en niños recién nacidos o contra el Virus del Papiloma humano (VPH) que se aplica a adolescentes.
Por otra parte, para aumentar la velocidad de implementación de esta etapa de investigación clínica el estudio será multicéntrico incorporándose más de 10 sitios de investigación a lo largo y ancho del país.
En este marco, con la implementación de los estudios clínicos de Fase II y III se sumarán otras 12 instituciones privadas, estimando así una participación de más de 250 profesionales en el proyecto.