Este freno se inició en el cierre de noviembre y generó que el rubro “alimentos y bebidas” sea el de menor incremento (3,5%) de todos los relevados por el INDEC para la elaboración del Indice de Precios al Consumidor (IPC) (4,9%).
El estudio de la consultora LCG determinó que este menor ritmo de aumentos se prolongó en diciembre.
“En la tercera semana de diciembre la suba de precios de los alimentos promedió 0,18%, desacelerando 1,16 puntos porcentuales respecto la semana anterior”, indicó el informe.
A su vez, señaló que “presentó una inflación mensual de 3,2% promedio en las últimas 4 semanas y 3% punta a punta en el mismo periodo”.
El trabajo se realiza sobre un total de 8 mil alimentos ofrecidos en cinco supermercados y reflejó además que en la semana en estudio sólo el 12% de los productos reflejaron aumentos.
Del análisis de las últimas cuatro semanas surge que frutas y verduras lideran los aumentos, con variaciones de 13,1%.
En este caso influye directamente la sequía que afectó estas producciones provocando la suba de los precios, incluso contra productos de menor calidad.
En el ranking que elabora LCG, le siguen las comidas “listas para llevar” (5,3%), lácteos y huevos (5%), bebidas e infusiones (4,1%), azúcar y miel (3,3%), condimentos (3%), panificados y cereales (2,6%), aceites (2,3%) y carnes (0,9%).
El precio de la carne se mantiene estable, también a causa de la falta de lluvias que provoca la liquidación temprana de hacienda.