Los gremios de la salud manifestaron que “a pesar del tiempo transcurrido con las medidas de protestas y el recrudecimiento de ciertas prácticas de amedrentamiento y presiones por parte de las autoridades ministeriales, los hospitales y centros primarios de salud de la provincia están parando en forma contundente. Llama la atención que algunos mandos intermedios de la estructura sanitaria (directores, jefes de servicios, coordinadores) que conocen muy bien como el salario de los trabajadores de la salud fue cayendo estrepitosamente estos últimos años apliquen políticas represivas de intimidar o atemorizar al empleado de salud por las medidas de protestas.
Prosiguieron, “esos trabajadores que estuvieron al frente de la pandemia, que sufrieron recortes de sus licencias reglamentarias, que se enfermaron, que algunos partieron al infinito, que tuvieron que duplicarse para atender gran cantidad de pacientes, porque sus compañeros caían heridos en esta lucha contra ese virus en hospitales repletos de enfermos; deben ser reivindicados o reconocidos en su labor, y no sucede”
“Hoy realizamos una asamblea en el CAPS Antártida donde informamos e intercambiamos opiniones y argumentos sobre la situación sanitaria, observando una gran voluntad y convencimiento de que el camino emprendido de exigencias al gobierno no tiene retorno si no hay reconocimiento al trabajador sanitario”.
Agregaron que “vamos a seguir protestando en sus diferentes formas, porque hay decisiones y convicciones del gremio y de los trabajadores a luchar hasta las últimas consecuencias por los justos objetivos trazados”.
Para culminar expresaron que “mañana es el último día del paro de 96 horas y se darán a conocer las nuevas medidas de protestas para la semana que viene”.