Ante la creciente presencia de la contagiosa variante Delta, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) advirtió de la necesidad de avanzar en el proceso de vacunación en Latinoamérica y mostró preocupación al relevar que al día de hoy solo una de cada cinco personas de la región está vacunada contra la Covid-19.
La directora de la OPS, Carissa Etienne, indicó en conferencia de prensa que la variante Delta ya es "predominante" en el continente americano, por lo que remarcó la necesidad de continuar aplicando la vacuna anti Covid.
En este sentido, el director adjunto de la OPS, Jarbas Barbosa, advirtió que ningún país de la región cuenta con el 70% de la población vacunada con la pauta completa y subrayó que contar con el 40% o 50% "no es suficiente" para contener la transmisión del coronavirus.
Las tasas de vacunación registran, además, una gran disparidad con países como Chile y Uruguay, con más del 70% de la población con al menos una dosis, y otros como Perú, Paraguay y Bolivia por debajo del 30%.
En la última semana se registraron 1,4 millones de contagios y 20.000 muertes en América.
Por zonas, Etienne destacó que en Centroamérica y el Caribe los casos están en alza, mientras que en Sudamérica muestran un descenso en las últimas semanas.
La incidencia de la salud mental
La emergencia sanitaria producida hace 16 meses por la pandemia del coronavirus no solo provocó la muerte de más de 2 millones de personas en las américas, sino que se sumaron el estrés y el miedo que invadieron la vida cotidiana, con pérdidas de empleo sin precedentes y provocaron nuevos estadios de sufrimiento mental y psicológico en las personas, indicó Etienne cuyo fenómeno describió como una "crisis de salud mental" en la región.
Cerca de un 60% de la población de las américas sufre ansiedad o depresión, indicó la directora de la OPS en la conferencia de prensa.
"Hoy nos enfrentamos a una crisis de salud mental que, si no se aborda, tendrá graves consecuencias. No solo empeorará la carga de los trastornos de salud mental en nuestra región, sino que también prolongará el impacto de la pandemia", advirtió Etienne.
Etienne dijo que aunque la demanda de apoyo psicológico nunca fue tan alta, las tres cuartas partes de los países que suministraron datos a la OPS reportaron problemas para ofrecer ese apoyo a la población.
"Más de la mitad de los programas escolares de salud mental y más de las tres cuartas partes de los programas fuera de las escuelas se han interrumpido parcial o totalmente en un momento en el que más del 15% de los jóvenes sufren depresión", indicó.
"Y casi el 90% de los países participantes informan que los servicios de psicoterapia y asesoramiento en salud mental se han visto interrumpidos; sin embargo, hoy hasta el 60% de las personas en nuestra región sufren ansiedad o depresión", agregó.
También señaló mayores dificultades para el acceso a medicación y tratamientos especiales.
Etienne subrayó la importancia de integrar la atención de la salud mental en los planes de respuesta a la Covid-19, e instó a los países a cumplir sus compromisos en ese sentido.
"Los países deben invertir en salud mental ahora para capear la amenaza constante de la pandemia y limitar sus efectos dominó en los próximos años", afirmó.
"Esta pandemia es un recordatorio de que la buena salud mental es vital para la salud de nuestra región y el bienestar de nuestras sociedades", dijo Etienne.