El primer ministro británico, Boris Johnson, dijo que prefería ver "cuerpos apilados" antes que ordenar otro encierro ante el avance del coronavirus, confirmó su ex asesor Dominic Cummings y calificó de "absoluto desastre" la forma en que se gestionó la pandemia.
Ante una comisión parlamentaria, el ex consejero afirmó que escuchó al premier conservador pronunciar esa frase el 31 de octubre pasado después de haber decidido, tardíamente, decretar un segundo confinamiento, tal como informó en su momento la cadena BBC.
Johnson negó haberlo dicho, pero al ser interrogado por una legisladora, Cummings afirmó que lo que publicó la BBC "es correcto" e indicó que él mismo lo escuchó cuando lo dijo, reportó el diario The Guardian.
Durante su comparecencia, Cummings criticó al Gobierno por no haber tenido un plan para proteger a la población de la pandemia y calificó la falta de datos para evaluar la amenaza del coronavirus como un "absoluto desastre".
El hombre, que fue un influyente asesor del primer ministro y cerebro detrás la campaña del Brexit, se enfrentó a una serie de preguntas de los parlamentarios sobre las decisiones que se tomaron en torno a la pandemia durante el tiempo que estuvo trabajando en Downing Street.
Antes de comenzar a enumerar los errores, Cummings se disculpó por las equivocaciones cometidas durante la crisis y afirmó que el Gobierno "falló" cuando "la gente más nos necesitaba".
Miles de muertes innecesaria
Dijo que miles de personas murieron innecesariamente como resultado de errores del Gobierno en el manejo de la pandemia.
Entre una serie de acusaciones, reveló que el primer caso confirmado de coronavirus fue a fines de enero y en las semanas siguientes hubo un goteo de casos traído por viajeros de Asia y Europa continental.
Pero sostuvo que según los datos publicados el pasado verano el virus había entrado en al menos 1.300 ocasiones distintas a fines de marzo.
Afirmó que el virus estaba instalado en el país y se propagaba antes de que nadie lo supiera.
Aseguró además que el primer ministro todavía consideraba la pandemia como "solo una historia de terror" en febrero del año pasado, y estaba dispuesto a hacer todo lo posible para mostrarle a la gente que no había ningún riesgo importante.
TambiénDominic Cummingscriticó a los ministros de alto rango, alegando que "Johnson estaba dispuesto a ser inoculado con coronavirus en directo para mostrar a la gente que era sólo la nueva gripe porcina".
"Johnson estaba dispuesto a ser inoculado con coronavirus en directo para mostrar a la gente que era sólo la nueva gripe porcina".
"No importa si tienes grandes personas haciendo comunicaciones. Si el primer ministro cambia de opinión diez veces al día y luego llama a los medios de comunicación y contradice su propia política, día tras día, van a tener desastres en las comunicaciones", afirmó.
Dijo que Johnson estaba en ese momento argumentando que el confinamiento era un error y lo comparó con el alcalde de la película Tiburón, el clásico film de Steven Spielberg, que se negaba a cerrar las playas abiertas porque sería malo para el turismo y para la comunidad.
En ese sentido Cummings relató que Johnson estaba preocupado por el impacto en la industria del turismo, pero le habían advertido que si no controlaban durante abril no habría industria turística.
Cummings también apuntó contra el ministro de Salud, Matt Hancock, al afirmar que estuvo "completamente equivocado" cuando sugirió que la inmunidad colectiva nunca fue parte del plan original del Gobierno y lo acusó de mentir.
Cummings, fue el hombre más poderoso del Gobierno británico desde su nombramiento como asesor principal del líder conservador en julio de 2019.
Protagonizó su mayor polémica en mayo del año pasado, cuando se descubrió que había abandonado Londres en pleno confinamiento, cuando estaba prohibido alejarse del domicilio.