Francia anunció este miércoles que no cambiará su plan de aplicar la vacuna contra el coronavirus del laboratorio Johnson & Johnson a los mayores de 55 años, pese a la decisión de Estados Unidos de suspender su uso por su posible relación con coágulos sanguíneos.
"Recibimos la primera entrega de vacunas, es decir, 200.000 dosis que llegaron a principios de semana (...) actualmente se están enviando a los médicos y farmacias", dijo el vocero del Gobierno, Gabriel Attal. "Va a ser distribuida y administrada en las mismas condiciones previstas actualmente para la vacuna AstraZeneca, es decir para las personas de más de 55 años", agregó, citado por la agencia de noticias francesa AFP.
El anuncio se da un día después de que las autoridades sanitarias estadounidenses recomendaran suspender "por precaución" el uso de la vacuna de Johnson & Johnson, mientras investigan casos graves de formación de coágulos sanguíneos en vacunados.
Attal ratificó, asimismo, que Francia mantiene su "confianza" en el inoculante del laboratorio sueco-británico AstraZeneca, tras el dictamen favorable de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), más allá de los informes sobre casos excepcionales de cóagulos sanguíneos.