En esta segunda ola de Coronavirus, que ya fue reconocida por autoridades nacionales y por el propio gobernador Ricardo Quintela, una de las principales preocupaciones es el nivel de ocupación de camas de las instalaciones sanitarias, tanto estatales como privadas, que en La Rioja funcionan como un solo sistema ante la pandemia.

Como explicaron las autoridades de salud provinciales y nacionales, durante el año pasado las fuertes medidas de restricción a la circulación sirvieron para reforzar el sistema sanitario y principalmente en la capacidad de internación.

Sin embargo, en varias grandes ciudades argentinas, sobre todo en el AMBA, el crecimiento tan elevado de los contagios en poco tiempo pone a los hospitales, clínicas y sanatorios al borde del colapso.

Si bien a nivel local la situación no es de tal gravedad, La Rioja no escapa a este fenómeno y los datos oficiales revelan que las patologías respiratorias derivadas del COVID demandan una fuerte proporción de camas disponibles en Capital.

De acuerdo a la información que obtuvo NUEVA RIOJA del Ministerio de Salud de La Rioja, tanto en el Hospital Regional Vera Barros como en el Hospital Virgen de Fátima, especializado en COVID, este domingo las áreas destinadas a esta patología estaban prácticamente a tope, aunque con un dato que trae cierto alivio: la terapia intensiva común tiene todavía cierta disponibilidad.

Los números

Según el informe, en el Hospital Enrique Vera Barros de un total de 157 camas, 97 se encuentran ocupadas y 18 respiradores conectados, es decir que el porcentaje de ocupación es del 57%. 

Mientras que en la Unidad de Terapia Intensiva la ocupación es del 43%. Pero lo realmente preocupante es que en el área respiratoria de Clínica Médica la ocupación es del 100%, en Unidad Coronaria un 83% mientras que en la Guardia es de 39%. Cabe aclarar que hay un total de 46 pacientes COVID-19 positivos en este nosocomio.

El panorama en el Hospital Virgen María de Fátima es similar, aunque es todavía más alta la ocupación de camas en UTI y Clínica Médica.

En el hospital universitario, de un total de 62 camas, 45 se encuentran ocupadas y 13 respiradores conectados, el porcentaje de ocupación es de 73%.

El dato más preocupante es que el área de terapia intensiva está completa y en Clínica Médica la ocupación es de un 91%; allí el total de los pacientes COVID-19 positivos es de 45.

La leve disminución de los casos que se pudo ver en los últimos días hace pensar que la presión sobre las instalaciones hospitalarias podría aflojar, al menos por los pacientes de Coronavirus, y darle un respiro a un sistema que se encuentra muy estresado.

Preocupación en el AMBA

Ayer se levantaron fuertes voces de alerta por la casi saturación de la internación, principalmente en el AMBA, lo que involucra a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y a la provincia de Buenos Aires.

Por un lado, las camas de terapia intensiva de los sanatorios privados de la Ciudad de Buenos Aires están cubiertas entre un 95 a 100% para todo tipo de pacientes, según información suministrada por la Asociación de Médicos de la Actividad Privada. (Ver página 18 de esta edición)

Además, el ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollan, dijo este domingo que el distrito se encuentra "en un nivel de camas" de terapia intensiva "como en el peor momento del año pasado" y advirtió que a este ritmo "puede colapsar el sistema muy pronto", en el marco de la segunda ola de coronavirus que afecta a todo el país.

Sin embargo, el titular de la cartera sanitaria bonaerense aclaró en diálogo con Radio 10 que el colapso "entendido como la imposibilidad de dar respuesta no sucede" porque se implementó "un sistema de derivaciones permanente, hoy muy estresado, trasladando pacientes de donde se llenan los servicios y descomprimiendo".

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