"Estimados fans, gracias por sus mensajes positivos. Recuerden también que la jueza de línea que fue golpeada por la pelota también necesita el apoyo de nuestra comunidad. Ella no ha hecho nada malo en absoluto. Le pido que la apoyen y la cuiden especialmente durante este tiempo", publicó Djokovic en su cuenta oficial de Twitter, en referencia a los mensajes agresivos que recibió Clark tras la descalificación del serbio.

El serbio, de 33 años, perdía el domingo último con el español Pablo Carreño Busta por 6-5 el primer set del partido que animaban en Nueva York por octavos el primer Grand Slam post pandémico, y luego de haber cedido su servicio protagonizó una reacción intempestiva cuando, frustrado, lanzó la pelota hacia atrás desde abajo y golpeó sin querer en la garganta a la jueza de línea, que cayó inmediatamente contra el fondo y luego al piso.

Esa reacción motivó la histórica descalificación del serbio, siendo la primera vez que le ocurre a un número uno del mundo y en un Grand Slam, lo que le impidió además ir en busca de un título que le hubiera permitido quedar a uno del español Rafael Nadal (19) y a dos del suizo Roger Federer (20), siendo que ambos no participaron del US Open.

"Esta situación me dejó muy triste. Desde estos momentos, quiero que nos hagamos más fuertes, compartiendo amor con todos", añadió Nole, luego de que sus fanáticos protagonizaran varias agresiones a la jueza de línea estadounidense Laura Clark a través de las redes sociales, durante las horas posteriores a la sanción que derivó en su expulsión del torneo.

Djokovic, quien además está impulsado una nueva asociación de jugadores que le debata el poder a la ATP, fue campeón este año en Australia, Dubai y Cincinnati, había ganado los 26 partidos que jugó durante 2020 y de regreso a Belgrado, se preparará para la gira sobre polvo de ladrillo que incluirá los torneos de Roma y Roland Garros.