Ayer al mediodía y durante varias horas, el fiscal de Tigre, Mariano Magaz, realizó una inspección ocular en el sector del río Carapachay donde el viernes por la noche la lancha que conducía el abogado penalista Manuel Beccar Varela, de 46 años, embistió a otra en la que viajaba un matrimonio y su hija de 25 años que falleció tras la colisión. Fuentes de la investigación confirmaron que el letrado, que quedó imputado por “homicidio culposo agravado por lesiones”, tenía de acuerdo al test de alcoholemia realizado por Prefectura una concentración de alcohol “de 0,8 de cuando el máximo permitido es de 0,5”.

 

Magaz recorrió la zona acompañado por peritos para tratar de dilucidar cómo ocurrió el siniestro que le costó la vida a Tamara Suetta, y que dejó internados en el Hospital de Pacheco a sus padres, Angel Suetta, de 63 años, y Elena Fontini, de 62, con heridas de distinta consideración.

 

El fiscal, quien tomó el caso ayer, también tomó las primeras testimoniales a vecinos y prefectos que llegaron al lugar para rescatar a las víctimas. 

 

Según fuentes de la causa, la situación de Beccar Varela sería complicada, ya que no sólo ingirió alcohol por encima de lo permitido sino que habría incurrido en una maniobra ilegal al cruzarse de carril provocando el choque que hundió la lancha de la familia Suetta, en una curva del río Carapachay.

 

Al momento del choque, el reconocido abogado volvía de un asado junto a varios socios del estudio jurídico Beccar Varela, entre ellos, Guido Krolovetzki, de 40 años, y Maximiliano D’Auro, de 44. Mientras la embarcación de los abogados iba hacia el Puerto de Frutos, la del  matrimonio Suetta, quienes habían recogido a su hija en el continente, emprendía el regreso a la casa familiar en el arroyo Las Animas.

 

Una vecina, Analía, contó a este diario que “son gente muy conocida por los isleños porque tienen un astillero” y explicó que según las versiones de quienes llegaron al lugar, “cuando volvían de buscar a su hija, alrededor de las ocho de la noche, la otra lancha, que venía a alta velocidad, se les cruzó de mano, porque en el río también hay manos y los pasó por arriba. La lancha de ellos se hundió mientras que a la otra no le pasó nada”.

 

Según fuentes de la investigación, los primeros testimonios recolectados por la fiscalía apuntan en la misma dirección: una maniobra negligente que terminó incrustando la nave, Bicuña, de Beccar Varela contra la embarcación Correcamino, de los Suetta.

 

De acuerdocon los vecinos de la zona “es un lugar muy complicado donde es necesario ir a poca velocidad ya que sino generalmente se invade el otro carril”.

 

En tanto, los investigadores detallaron que no hay informes sobre la velocidad a la que iban las lanchas porque “recién los peritajes de mecánica y accidentología vial estarán listas durante el transcurso de la semana”.

 

La autopsia de la joven “finalizó a las 18 y sólo queda por determinar si la joven murió o no en el momento del impacto”, informó la misma fuente.

 

Los padres de Tamara se encontraban hasta ayer por la noche en el hospital Pacheco, donde por orden del Ministerio de Justicia se pusieron a disposición psicólogos profesionales para brindarles contención.

 

Suetta padre sufrió una fractura cervical sin desplazamiento y escoriaciones en distintas partes del cuerpo. La madre de la joven fallecida tiene una lesión en la clavícula derecha, pero, a diferencia de su esposo, “no sabe que su hija falleció, está en estado de shock y desde el área de Salud Mental nos informaron que irán avanzando poco a poco para ver hasta dónde está dispuesta a conversar”, dijo Hugo Gass, director del Hospital, en declaraciones a la prensa. 

 

En cuanto al abogado penalista, las fuentes sostuvieron que “está imputado por homicidio culposo agravado por lesiones, pero no está detenido debido que está a derecho, mostrando voluntad de cooperar, sin indicios de darse a la fuga, por lo que está en su domicilio”.

 

Según consta en la página web del estudio jurídico Beccar Varela, el letrado, socio de la firma desde el año 2012, se especializó en el área de defraudaciones y estafas, lavado de dinero, penal tributario, aduanero, cambiario, delitos contra el honor, delitos ambientales, delitos contra la administración pública, delitos contra la propiedad intelectual y derechos marcarios, entre otros. El abogado, que arrancó su carrera profesional en la Justicia Federal Penal en el año 1988 pasando al Tribunal Oral Criminal 6 en el año 1993 hasta el año 1996, también fue Jefe del área penal del grupo asegurador Sicma, perteneciente a Perez Companc, y funcionario bonaerense (1999-2001).

 

Un siniestro similar ocurrió hace dos años, cuando en el Canal Vinculación dos lanchas que iban en sentido contrario colisionaron, y perdieron la vida Angeles Bruzzone y Manuel, de 14 años, la ex mujer y el hijo del dirigente radical Federico Storani.