El programa, denominado Esquema de Gas 2020-2024, que será oficializado mediante un decreto a publicar en las próximas semanas, tendrá como pilar principal un esquema competitivo por subasta a 4 años para el desarrollo on shore. A su vez, para los proyectos off shore se aplicará un plazo a ocho años para amortizar los costos.
Durante la presentación, Kulfas agradeció “el compromiso que han mostrado todos los actores del mercado” que aportaron para el diseño del plan, que promueve que el del gas “sea un sector que lejos de ser un obstáculo se convierta en una palanca para el desarrollo económico del país”.
La iniciativa permitirá proyectar “una oferta vigorosa que sea compatible con los ciclos económicos, que nos permita ahorrar importaciones y, por lo tanto, recursos fiscales”, dijo el ministro. Además resaltó que “el objetivo es que la Argentina se convierta en un país superavitario con inversión, tener un sistema abierto, transparente y competitivo”.
El principal puntal de la secretaría de Energía pasa por asegurarle a las empresas productoras bloques fijos de 70 millones de metros cúbicos diarios (MMm3/d) por 365 días hasta 2024. Además, contará con un bloque extra por cada período invernal y permitirá en temporada de menor demanda – la estival – garantizar prioridad en el despacho como también para la exportación.
Bajo este esquema, se prevé autorizar volúmenes de exportación de hasta 11 MMm3/d en época estival en firme. En ese contexto, las empresas deberán comprometerse al menos a sostener la producción de este año, debido a que uno de los focos del plan es que las firmas puedan mantener los puestos de trabajo.
El subsecretario de Hidrocarburos, Juan José Carbajales, que había adelantado este esquema el miércoles durante una conferencia virtual con la Cámara de Comercio de Estados Unidos en la Argentina (Amcham), aseguró este jueves que la iniciativa traerá “certidumbre” para todos los actores del sector. A su vez, indicó a los empresarios que “se está pensando en una garantía para asegurar el cobro de los productores que se está terminando de diseñar”.
El CEO de la empresa de mayoría estatal YPF, Sergio Affronti, consideró que con la iniciativa se da “previsibilidad en cuanto al precio” y al mismo tiempo señaló que “normaliza un mercado de gas que en los últimos años había presentado distorsiones severas. Por otro lado nos permite satisfacer de forma eficiente distintos segmentos de la demanda”.
Otro de los puntos importantes tiene que ver con los usuarios y las tarifas, que impactan fuertemente en los ingresos ciudadanos. Al promover la producción local, el efecto deseado es lograr una reducción en las importaciones de Gas Natural Licuado (GNL) y de combustibles líquidos, para permitir reducir el costo del servicio.
Este no es un tema menor. Las tarifas, actualmente congeladas, contarán con un nivel de subsidios fijado por el Poder Ejecutivo. De esta manera, buscarán asegurar el suministro de los sectores vulnerables y garantizar el “pass througth” del valor del gas de la productora a la distribuidora como establece la ley. Además, avanzarán en el descongelamiento de las tarifas de gas y electricidad pero de forma gradual para evitar un golpe al bolsillo de los ciudadanos.
Por otro lado, el precio del gas en PIST (Precio de Ingreso al Sistema de Transporte o también conocido como En boca de pozo) surgirá del mercado. Sin embargo, si bien se garantizará la libre competencia y la transparencia, el Estado fijará condiciones para asegurar los objetivos del programa.
Durante las últimas semanas, el Gobierno venía analizando la necesidad de promover un precio de incentivo que hasta se llegó a estimar en u$s3,4 por millón de BTU, con el objetivo de que las empresas retomen la actividad en el gas luego de un año de declino y reducción de inversiones por un problema de precios y de demanda.