Mientras atraviesan una de las crisis más profundas de la historia, las automotrices presentarán al Gobierno de la Nación un plan que tiene como objetivo aumentar la producción local y la venta de vehículos 0 km en los concesionarios de todo el país.

El proyecto, que fue revelado por La Nación, tendría dos ejes: mejorar las condiciones de exportación e incentivar la compra de autos nuevos en los sectores más populares.

Para facilitar el acceso al cero kilómetro, el sector propondrá al Gobierno una línea de créditos blandos. Podría tratarse de préstamos a una tasa cercana al 24 por ciento y con un plazo de 36 meses; es decir, a pagar en tres años.

Con estos créditos, que serían presentados de manera oficial como se hizo en períodos anteriores (los programas Juni0km, Juli0km y Agost0km, por ejemplo), los ciudadanos podrían financiar hasta el 80 por ciento de los autos. Esto significa que, tomando como referencia los valores actuales del mercado, con 150.000 pesos en el bolsillo se pondría ingresar al mercado.

En cuanto a las exportaciones, las automotrices pedirán una reducción en las retenciones y un aumento en los reintegros a fin de compensar los impuestos indirectos de la cadena (llegarían al 11,6 por ciento), según La Nación.

En junio, la venta de autos 0 km subió luego de dos décadas de caída ininterrumpida en comparación interanual. Y de un mes a otro (mayo vs. junio) creció un 74 por ciento, aunque las proyecciones del sector para 2020 son de alrededor de 250 mil unidades, la mitad de lo que preveían antes de la pandemia.

Las exportaciones, en tanto, crecieron de mayo a junio un 226,1 por ciento (en mayo había todavía algunas fábricas cerradas, tras un abril en cero), pero la actividad industrial sigue lejos de los años anteriores. En el primer semestre, el sector cayó un 46,4 por ciento.