La aprobación del crédito se llevó a cabo durante una videoconferencia de la que participaron el secretario de Asuntos Estratégicos de la Nación, Gustavo Béliz, y el subsecretario Relaciones Financieras Internacionales para el Desarrollo, Christian Asinelli, y el directorio de CAF.
El crédito será pagado a 20 años y su ejecución estará a cargo del Ministerio de Desarrollo Social en un plazo de 18 meses y que tendrá un componente para financiar la evaluación de la política a cargo de la Secretaría de Asuntos Estratégicos.
Desde principio de este año, el Gobierno de Alberto Fernández diseñó el Plan Nacional Argentina Contra el Hambre con el objetivo de atender la emergencia socio-económica del país. La Tarjeta Alimentar está destinada a las madres y padres con hijas e hijos de hasta 6 años que al momento estén percibiendo la AUH, embarazadas a partir de los 3 meses que actualmente perciben la asignación por embarazo, y personas con discapacidad que reciban la AUH.
A junio de 2020, la Tarjeta Alimentar tiene 1,5 millones de titulares y beneficia a un total de 2,8 millones de argentinos. Hasta el momento se llevan invertidos alrededor de 40.000 millones de pesos y está programado que a diciembre de este año el monto total alcance los 91.000 millones de pesos.
La implementación de las tarjetas es automática, a partir del cruce de datos entre ANSES y los beneficiarios de las asignaciones, por lo que no es necesario que realicen ningún trámite. ANSES da aviso por teléfono o mensaje de texto al número que está registrado en su base de datos, mientras que las tarjetas son entregadas de manera directa por el Banco Nación, o el banco público que determine cada provincia, sin intermediarios ni gestores.
La tarjeta, que se recarga de manera automática todos los meses, puede ser utilizada únicamente para la compra de alimentos, no suplanta ninguna de las políticas vigentes, ni reemplaza la Asignación Universal por Hijo y es una política de complemento integral alimentario.