Lucas Pertossi grabó con su celular el ataque que terminó con la vida de Fernándo Báez Sosa, en la madrugada del sábado 18 de enero en Villa Gesell. El video fue encontrado por los investigadores que trabajan en los teléfonos que les secuestraron a los detenidos, informó C5N.
Los celulares de los acusados fueron incautados en la casa que ocupaban en Villa Gesell y fueron enviados a peritar a la Policía Federal. El procedimiento está a cargo de expertos de la División de Operaciones Técnicas de la Agencia Regional de la PFA, cuyo laboratorio se encuentra en la ciudad de Mar del Plata.
Entre los teléfonos, se analizó el de Pablo Ventura, el joven que estaba en Zárate y que fue falsamente involucrado por los detenidos.
Si bien los resultados aún están "incompletos", analizaron un total de diez dispositivos y de ellos hay seis equipos que resultan más difícil desbloquear. Esos equipos pertenecen justamente a Máximo Thomsen acusado de ser coautor del homicidio, Lucas y Luciano Pertossi, Matías Benicelli, Alejo Milanesi y Juan Pedro Guarino.
Según informó C5N, al parecer los detenidos borraron algunos videos de sus teléfonos pero se supone que los rugbiers tuvieron tiempo de compartir las imágenes entre ellos.
La prueba es fundamental para determinar, no sólo que el que filmó "no" participó de la golpiza, sino que puede inferir que hubo premeditación en el ataque a Fernando, más aún conociéndose "la seña" (pasarse una mano por el cuello, que se presume un "te voy a matar") que hizo Thomsen mientras lo expulsaban esa noche del boliche.
La fiscal Verónica Zamboni, que está a cargo de la investigación, recibirá dos discos con una enorme cantidad de información extraída de los diez teléfonos que les decomisaron a los rugbiers. Los dos equipos contienen cerca de cinco terabytes de datos que fueron analizados por expertos de la Policía Federal, que jerarquizaron la información para la causa.
Ahora Zamboni junto a un equipo de especialistas de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Villa Gesell analizarán imágenes, conversaciones o elementos que puedan precisar el grado de intervención o no de cada uno de los rugbiers imputados por el crimen. Una fuente de la investigación indicó que la extracción de datos incluyó información de la mensajería de texto, WhatsApp, capturas de pantalla y videos, incluso que hayan sido eliminados, consigna la agencia Télam.