El presidente electo, Alberto Fernández, reconoció su intención de dejar de lado los animales en los billetes para volver a poner figuras notables, en un claro gesto de diferenciación con el gobierno saliente.
“¿Pondría a Borges o a Alejandra Pizarnik en un billete de cien pesos?”, le preguntaron durante una entrevista con Página|12, a lo cual el líder del Frente de Todos respondió con algún grado de mordacidad: “Sí. Por qué no. Lo que no pondría es una ballena. Quién puede negar lo que es Borges, Cortázar, Sábato”.
No obstante, advirtió: “Tengo algunas urgencias antes, pero me gustaría que en los billetes estén los próceres y los grandes hombres y mujeres de la Argentina”.
Respecto a la actitud de Cambiemos, criticó: “Lamento mucho que Evita haya desaparecido de los billetes, pero también lamento que desaparezcan Sarmiento, Belgrano, San Martín”.
La dirección del Banco Central, con Federico Sturzenegger a la cabeza, planteó desde finales de 2015 cambios en el criterio para ilustrar los billetes con la presencia de especies autóctonas. De este modo, el de $20 tiene un guanaco, el de $50 un cóndor andino, el de $100 una taruca, el de $200 una ballena franca austral, el de $500 un yaguareté y el de $1000 un hornero.
"Para mí una de las cosas chiquitas pero simbólicas más lindas que hicimos es poner animales en los billetes “, defendió la medida el jefe de Gabinete Marcos Peña durante el Coloquio de IDEA de 2017 y agregó: “Es la primera vez en la historia que hay seres vivos en nuestra moneda. Dejamos la muerte atrás y vivimos nuestra vida".