En una carilla de texto redactado por asesores del Frente de Todos, se estableció un cronograma institucional para la transmisión del mando que concluye cuando Mauricio Macri entregue la banda y el bastón presidencial a Alberto Fernández. El borrador peronista ya llegó a la Casa Rosada y el gobierno por ahora no puso reparos a la propuesta que sería oficializada en los próximos días.

El paper reservado del Frente de Todos establece que la proclamación oficial de la fórmula Alberto Fernández-Cristina Fernández de Kirchner se realizará en una Asamblea Legislativa convocada para el 13 de noviembre. Ese día, si no hay cambios de agenda, podrían encontrarse Cristina Fernández y Gabriela Michetti para conversar sobre la transición en la Cámara Alta.

Michetti y Cristina hablaron por teléfono para iniciar la transición en el Senado antes del viaje de la expresidente a la Habana para visitar a su hija Florencia. Cinco días más tarde, los representantes de CFK se encontraron con la vicepresidente para avanzar en esta transición parlamentaria.

Junto a Michetti se alinearon Federico Pinedo -presidente provisional de la Cámara Alta - y los senadores peronistas Virginia Garcia (mandato cumplido) y Marcelo Fuentes que responden a los planes de Fernández y Fernández de Kirchner. En este cónclave, Garcia y Fuentes plantearon a la vicepresidente la necesidad de extender las sesiones ordinarias que terminan el 30 de noviembre.

García y Fuentes propusieron la prórroga de las sesiones ordinarias para sancionar el presupuesto nacional 2020. Michetti y Pinedo quedaron en contestar. Y es muy probable que acepten el plan del Frente de Todos.

El borrador elaborado por los asesores de Fernández propone además que el 28 de noviembre juren los nuevos senadores: son 24 en total.

Y una semana más tarde, el 4 de diciembre, deberían jurar los 130 diputados electos en los comicios del 27 de octubre. El presidente de la Cámara Baja será Sergio Massa y la primera minoría pertenecerá a Juntos por el Cambio. Fernández diseña su propia estrategia parlamentaria, y Massa y Cristina deberán juntar voluntades para cumplir con las necesidades legislativas del futuro presidente.

Hasta ahora, acorde al paper reservado que fue elaborado por el Frente de Todos, la secuencia de la transmisión de mando comienza el 13 de noviembre con la proclamación de la fórmula presidencial ganadora. Y a continuación, el 28 de noviembre, jurarán los senadores, y una semana más tarde, los 130 diputados nacionales.

El 10 de diciembre, Fernández jurará como Presidente de la Nación en el Salón Blanco de la Casa Rosada. En primera fila estará la familia del líder peronista, y a continuación los futuros miembros del gabinete nacional y Cristina Fernández, aún vicepresidente electa.

Mauricio Macri entregará la banda y el bastón presidencial a Fernández, que después de jurar y los obvios saludos de rigor, partirá con Cristina hasta el recinto de la Cámara de Diputados, adonde participará de su jura como Vicepresidente de la Nación.

Cuando este hecho institucional suceda, CFK habrá quebrado todos los récords de la democracia: en 36 años, fue elegida diputada, senadora, presidente y desde ese momento vicepresidente.

Tras los esperados aplausos a Cristina, el borrador redactado por asesores del Frente de Todos establece que Fernández hará su discurso de Estado ante la Asamblea Legislativa. En ese discurso, el presidente describirá qué país quiere y qué medidas pondrá en marcha para salir de la crisis causada por la administración de Cambiemos.

“Alberto hará el discurso, esperó ese momento toda su vida", confió un asesor del aún presidente electo que lo conoce desde el comienzo de la democracia.

Además de estar sujeto al consentimiento del presidente Macri, el borrador para la transmisión de mando plantea un interrogante que aún no han sido salvado: falta establecer adonde juran y cuando los ministros del Gabinete. Esto puede suceder junto a Fernández en el Salón Blanco, o a continuación de la jura de Cristina en Diputados.

Por último, la propuesta del Frente de Todos fija que la prórroga de las sesiones ordinarias terminará el 30 de diciembre, y que el presidente Fernández convocará a sesiones extraordinarias a partir del 6 de enero. Por primera vez en mucho tiempo, los legisladores trabajaran a destajo durante el verano porteño.